DIEZ DISTRITOS DE LIMA NO CUENTAN CON BIBLIOTECA MUNICIPAL
· Concejos
de La Molina y San Juan de Miraflores son dos de los que incumplen la ley al no
tener esos espacios culturales.
La Molina tiene amplias áreas verdes y
variados servicios municipales. Un gran porcentaje de su población tiene acceso
a educación de calidad. Los ingresos que su concejo tiene por tributación son
envidiables y tiene una población que supera los 132.400 habitantes. Sin
embargo, aunque parezca increíble, no tiene biblioteca municipal.
Según datos del Sistema Nacional de
Bibliotecas, que es coordinado por la Biblioteca Nacional del Perú (BNP), La
Molina es uno de los 10 distritos de Lima Metropolitana que no cumplen con el
ordenado en el inciso 11 del artículo 82 de la Ley N° 27972 o Ley Orgánica de
Municipalidades, promulgada en el 2003. Esta señala como función de los
municipios distritales y provinciales, “organizar y sostener centros
culturales, bibliotecas, teatros y talleres de arte”.
Los otros distritos capitalinos que también
carecen de biblioteca municipal son Breña, Cieneguilla, Comas, El Agustino,
Pucusana, Punta Negra, San Bartolo, San Juan de Miraflores y Santa Rosa. Los 32
distritos restantes de Lima Metropolitana y la respectiva municipal provincial
sí mantienen estos espacios culturales en menor o mayor grado de desarrollo.
Los seis distritos del Callao también han implementado bibliotecas.
Las bibliotecas municipales son
públicas, al igual que las comunales, autogestionarias y muchas parroquiales.
En un manifiesto de 1994, la Organización de la Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) las calificó como instituciones
socio - culturales orientadas a satisfacer las necesidades de información y
recreación de los integrantes de sus comunidades, sin distinción de sexo, edad,
raza, religión u opción política.
PROYECTOS
EN CIERRES
“Si hasta ahora no se ha implementado una biblioteca en el distrito
ha sido por la dejadez de las gestiones anteriores.
Hemos logrado que el Ministerio de
Educación nos ceda el uso de un terreno de 900m2, entre las avenidas
Alameda del Corregidor y Los Fresnos para construir ahí nuestra biblioteca
municipal”, señala Daniel Figueroa, gerente de Obras de la Municipal de La
Molina.
El concejo invertirá S/.2,500.000 para
la obra. “El expediente técnico ya está
terminado. El proceso de licitación demorará la primera mitad del 2013. Luego
se iniciará la obra”, explica Figueroa.
Carlos Lévano, subgerente de
Educación, Cultura, Deporte y Recreación de la Municipalidad hasta el 2001.
“El distrito tenía una biblioteca
hasta el cuarto período del alcalde Adolfo Ocampo. Las gestiones que siguieron
no hicieron nada. No sabemos dónde están los libros. Ahora, Ocampo, en su
quinto período, gracias al presupuesto participativo, levantará en el 2013 una
Casa de la Cultura en Pamplona alta, que tendrá una biblioteca. El diseño se
está coordinando con el Ministerio de Cultura y con la BNP”, señala.
Según Doris Samanez Alzamora,
directora técnica del Sistema Nacional de Bibliotecas, en el país solo 790
concejos tienen bibliotecas y apenas 80 de ellas están formalmente integradas
al sistema. Cifras ínfimas si se toma en cuenta que según un reporte del
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) de febrero de este año,
el Perú tiene 1.838 municipios (195 provinciales y 1.643 distritales).
“Una biblioteca municipal moderna debe
no solo tener libros, también videoteca, sala multimedia, sala de niños con
ludoteca. Asimismo, debe contar con un bibliotecólogo titulado y brindar
información con la ayuda de la tecnología e Internet”, señala Samanez.
Si bien están lejos de ser una
biblioteca completa, desde hace 12 años Villa el Salvador cuenta con una
biblioteca móvil – Mundo Bus – que lleva cultura a los colegios y asentamientos
humanos del distrito.
PUEDEN
SER DENUNCIADOS
Ante
el Ministerio Público
Para el abogado Julio César Castiglioni,
los vecinos pueden denunciar por abuso de autoridad, en la modalidad de omisión
de funciones, a un alcalde que no instale una biblioteca municipal.
La
justificación
Si un municipio – aclara Castiglioni –
cuenta con pocos recursos, puede justificar la falta de una biblioteca porque
debe priorizar la limpieza y la seguridad.
El
Comercio – 08 de diciembre de 2012
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