COMETIÓ FALTAS Y DELITOS
CLARO QUE SÍ HAY CONFLICTO DE INTERESES
Aunque el ex premier Jorge del Castillo intenta restar importancia a las “gestiones” que realizó a favor de amigos
empresarios, señalando que ello no tiene nada de malo, las leyes vigentes
prohíben a los funcionarios y mucho más a los de tan alto rango auspiciar
causas privadas utilizando una posición de privilegio en la gestión del Estado,
señaló el especialista en administración pública Julio César Castiglioni.
Es una mentira decir que no hay conflicto de intereses cuando un ministro
intercede por un privado, como ha reconocido Del Castillo, sostuvo.
Castiglioni
dijo que la Ley Nº 276, Ley de Bases de la Carrera Pública, es muy clara al
señalar que ningún funcionario o servidor público puede patrocinar causas
privadas y que transgredir ello tiene una sanción administrativa.
Este comportamiento significa que se abusa de una condición de privilegio con
la finalidad de beneficiar a terceros y se afecta el derecho de igualdad que
tenemos todos los ciudadanos.
Pero, lo más grave, es que genera responsabilidades de carácter penal
configurando una serie de delitos como son: tráfico de influencias, abuso de
autoridad, patrocinio infiel (cuando se auspicia estando en posición de
privilegio para beneficiar a terceros); e interés en los contratos, que es una
forma de defraudación al Estado que se castiga con una pena de hasta 15 años de
cárcel.
Como funcionario público yo puedo atender las quejas de los administrados “de
manera pública” en mi oficina y en horarios de trabajo, “lo que no puedo hacer
es patrocinar intereses privados o atender quejas de modo personal o gestionar
expedientes fuera de la Presidencia del Consejo de Ministros o visitando la
suite de un hotel”, explicó.
La Primera – Lima, miércoles 28 de abril de 2010
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