“SUCEDERÁ LO QUE PASÓ EN EL 90”
Para Julio César Castiglioni, unas
elecciones sin Fujimori, cambiará radicalmente el mapa político y la victoria
será de quien la transite políticamente por “el centro”.
Castiglioni;
sobre próximas elecciones generales:
Legó
a su tierra natal, para presentar sus tres recientes obras. Es Julio César
Castiglioni, joven catedrático universitario, activo dirigente nacional del
Partido Popular Cristiano, poseedor de una excelente cultura jurídica y
política. ¡Qué Semana! Abrió sus páginas, para conocer algunas de sus
opiniones, sobre el tema que nos apasiona, la coyuntura política.
El país atraviesa por una situación
extremadamente crucial, cual es su pensamiento sobre este particular.
Si, la situación es muy delicada, creo
que hay que allanar el camino con tranquilidad, sin desesperarnos, sin
pretender hacer leña del árbol caído, sino por el contrario, tratar de
encontrar la solución para que la transición democrática sea viable…
¿Cuáles
deben ser los mecanismos de solución?
El único camino viable que yo encuentro,
es la reforma constitucional, que felizmente ya se dio, que se debe aprobar en
dos legislaturas ordinarias, la modificación del artículo 112 de la
Constitución, donde no hay reelección inmediata del presidente de la república
y una disposición final, en la que el actual periodo de los parlamentarios, y
los vice presidentes, termina el 28 de julio del 2001… creo que esa es la
salida más viable.
¿No
hay otras posibilidades?
Sí, hay otras, como aprobar la
modificación de la Constitución, ir a referéndum, pero esto sería muy tedioso y
muy largo. Para un referéndum hay que hacer campañas. Con lo cual no se podría
cumplir con los plazos de que el próximo 28 de julio, juramente el nuevo
presidente de la república, y una tercera opción que me parece poco viable de
hacer un gobierno de transición, de que se junten todos los partidos políticos
para gobernar, eso me parece poco viable e inmaduro.
Entonces,
usted apuesta por una modificación
constitucional.
Si, definitivamente debe ser así. Tiene
que estar el presidente Fujimori a la cabeza, pero claro está, tiene que
hacerse algunas correcciones como el sistema electoral, tiene que desaparecer
la ONPE, el RENIEC y tiene que remozarse el JNE, para garantizar unas
elecciones transparentes, y esto es muy sencillo, porque quitando las
comisiones interventoras del Poder Judicial y del Ministerio Público, estos dos
entes, podrán elegir libremente a sus representantes. Es decir, el JNE cambiará
tres de sus miembros, con lo cual se estaría garantizándose las elecciones,
porque como todos sabemos el Jurado Nacional de Elecciones, está compuesto de
cinco miembros y las votaciones se ganan por mayoría de tres a dos.
Sin
embargo, hay quienes manifiestan que con el presidente Fujimori en la cabeza,
conduciendo las elecciones, prácticamente no habría ninguna garantía de unas
elecciones limpias.
Yo no creo eso, o sea, sacar del cargo a
Fujimori del poder, es más bien crear un vacío de poder; porque hagamos la
figura, si renuncia Fujimori, asumiría Tudela, si renuncia Tudela, asumiría
Márquez y si éste renuncia, tendría que convocar a nuevas elecciones, como dice
la Constitución Política del Estado en el ámbito presidencial, pero el problema
lo encontramos en el ámbito parlamentario; aquí el mandato parlamentario es por
cinco años, y es irrenunciable, y solo habría una salida que prevé el artículo
134 de la CPP que es cerrar el parlamento siempre y cuando hayan censurado dos
gabinetes ministeriales, hecho que tampoco se ha producido, con lo cual, se
tendría que patear el tablero y se tendría un cinco de abril del 92, hecho que
nadie quiere, por lo tanto, el presidente Fujimori tendría que mantenerse en el
cargo, pero él no conduce, lo que hace
es convocar a elecciones.
Y
como calmar a esa juventud aguerrida, que se encuentra en las calles reclamando
un gobierno de transición.
Yo
he sostenido muchas polémicas en canales de señal cerrada en Lima, con personas
que piden esto, y no se trata de que uno esté a favor del Estado, sino se trata
de analizar la coyuntura fríamente; yo soy un profesor de Derecho
Constitucional, y tengo que buscarle la alternativa constitucional, y ello
equivale modificar la Constitución, y en consecuencia se tendría que optar por
ese camino. Ahora, la algarabía juvenil en las calles es un hecho que no se
puede controlar, es un derecho de hacerlo, pero cada día son menos las
personas, y solo es un sector nomás que quiere aprovechar la coyuntura para
sacar sus diversos, hecho que no debería suceder, y no es el momento…
Pero ¿decir cada vez son menos los
jóvenes y decir que son solo un pequeño grupo, no estamos hablando con un
lenguaje fujimorista?
No
se trata de hablar el mismo lenguaje fujimorista, tenemos que ser realistas. Yo
he protestado mucho en las calles… recordaba hace unos instantes, cuando estaba
en el colegio, con mis profesores, de los años 78-79 y eran las épocas más
difíciles, porque se luchaba contra la dictadura militar y recordaba cuando era
el alcalde escolar, incluso tenía matrícula condicional, y encabezaba las
revueltas, justamente, la experiencia nos hace pensar, de que ese no es el
camino adecuado en este momento.
Hablemos
sobre el rol de las instituciones políticas en las próximas elecciones;
lamentablemente no tenemos partidos políticos sólidos, y continuamos con los
famosos “movimientos independientes”. Qué hacer, para tener partidos políticos
con verdaderos representantes.
Con lo que se pueda y se tenga en la
mano, porque el tiempo es muy corto para que los partidos políticos se puedan
organizar, pero ese tiene su cáncer de origen. Por ejemplo, en el caso de
alcaldes, donde hay reelección indeterminada.
No
debe haber reelección indefinida entonces
Si, nosotros hemos planteado a través de
las asesorías a congresistas, a quienes asesoramos, de que, solo debe haber un
periodo de alcalde y regidores, porque el próximo va a ser de cinco años. Lo
mismo debe suceder con el Presidente de la república. Cuando se creen las
regiones, tampoco debe haber reelección inmediata de presidente regional:
porque de esta manera se abre la posibilidad para que surjan nuevos líderes y
vamos a dar la posibilidad de oxigenación de los partidos políticos y éstos
crecerán fortalecidos.
¡Puede
ser una buena alternativa!
Exacto, ahorita los partidos políticos
no crecen ni se renuevan, porque arriba siempre están los “corchos” y
siempre son los que sienten los llamados
a la convocatoria y son los primeros en ponerse a la fila de adelante,
postergando a nuevos líderes.
Dentro
de ese esquema, de la no reelección para nadie, cómo superar un mal histórico
que tenemos, referido a que cada autoridad cuando llega al poder, se creer la
octava maravilla del mundo, dejando de lado lo que dejó el anterior, imponiendo
obras personales.
Creo
que allí tendría que haber un plan de identidad nacional, un programa nacional,
un compromiso programático en la cual, el gobernante debe continuar lo bueno y lo positivo que
dejó el anterior y con eso no le estamos haciendo ningún favor al país. Pero,
así como existe la revocatoria solo para alcaldes- hecho que yo critico- debe
también ampliarse para regidores, jueces de paz, presidentes regionales,
parlamentarios e incluso presidente de la república. Que la revocatoria sea un
hecho completo…
Claro,
porque la ley de revocatoria, solo sirve como un medio de venganza política
desnaturalizándose la esencia y además está mal dada, porque no exige ninguna
fundamentación, solo una simple solicitud. A quién le correspondería modificar
esta ley, al presente o al próximo congreso.
Nosotros hemos presentando un proyecto
de ley a través d algunos parlamentarios a quienes asesoramos. En primer lugar,
se debe suspender los efectos de esta norma hasta que no se reglamente y en
segundo lugar, que se debe suspender la convocatoria a consulta en cuanto a
revocatoria, porque estamos próximos a una contienda electoral y no pueden
haber dos procesos electorales continuos, y como tal debe postergarse la
revocatoria, además, como usted bien dice, se juntan los enemigos y los que
perdieron la elección y revocan al alcalde, que de repente está haciendo una
buena labor…
Faltan
pocos meses para acudir a nuevas elecciones, ¿cree usted que sea oportuno
hablar de pre candidatos, o figuras presidenciales?
No, yo creo que no, creo que no es
oportuno y le voy a decir mi razonamiento; Fujimori tiene 57% en estos momentos
y atraviesa su peor momento, y el señor Toledo en su momento más alto, tuvo
45%...
¡Pero a qué encuestas se refiere usted!
A
las encuestas nacionales, aquellas que se manejan… entonces, si sale un
candidato, sabiendo que Fujimori no postula, y sale un candidato que logra
capitalizar ese cincuenta por ciento, más un diez por ciento de descontento que
hay en otro lado, es ya el presidente de la república.
Entonces, puede ser cualquiera…
Exacto,
puede ser cualquier candidato, no necesariamente el señor Toledo, a él creo que
la emoción le embargó y vino diciendo: vengo a ser el presidente del Perú, pero
un proceso electoral sin Alberto Fujimori, cambia totalmente el panorama
político, y puede ganar cualquier persona que logre sintonizar con el pueblo.
Y en qué consistiría esa empatía.
Eso
es lograr coger el centro y transitar por ese centro que transitó Belaúnde en
su primer proceso electoral, por ese centro que transitó el propio Fujimori ante
la polarización que existía ante el APRA y el FREDEMO, ese centro que agarró el
señor Toledo ante la polarización que existía entre Fujimori, Castañeda o
Andrade…
Ya conocemos a los probables candidatos,
¿usted ha visto a alguno de ellos, con ese perfil, de transitar por el centro?
Yo creo
que ninguno. De los candidatos que fueron, yo creo que ninguno.
Si
sale un candidato que por ahí debe estar, que de repente hasta podemos estar
hasta conversando. Va a suceder lo mismo que sucedió con el presidente Fujimori
cuando salió elegido en el 90.
Lentamente por allí parece surgir una
dama presidenciable. Lourdes Flores Nano. ¿Podría ser?
Es una
alternativa importante, he escuchado… he escuchado varias opiniones que sería
una candidata de consenso, creo que sí estaría en condiciones de hacerlo y ella
tiene una ventaja; ella no postuló en el último congreso, con lo cual está al
margen de cualquier intervencionismo partidario o sectáreo, ella ya está al margen
de cualquier, ella dijo me voy me retiro.
Y usted profundamente vinculado a ella
Por
su puesto, ambos somos del PPC y sería de mi agrado, que una integrante del
partido, aunque no estamos inscritos, formalmente no existimos… pero, una amiga
por lo menos, sea candidata presidencial.
Por allí, se filtró que usted se había
pasado a Vamos Vecino. ¿!Qué hay de verdad!?
No,
soy del PPC desde el 79 fecha en que me inscribí aquí en Huaraz, cuando su
secretario departamental era “Coco” Morán. Lo que pasó, fue que capacitamos a
los candidatos de este movimiento, como lo hacemos con otros movimientos, y por
allí se dijo que habíamos dejado el PPC, pero no fue así.
Hablando de asesorías, Waldo Ríos, no le
solicitó asesoría alguna. ¿Ha conversado con usted alguna vez?
No,
la única vez que lo vi, fue en el Club Huaraz cuando se inauguró. Me sorprendió
mucho su elección, no porque no se lo merezca, sino, por la cantidad de votos
que obtuvo, él obtuvo cerca de los 22 votos, hecho que no lo lograba ningún
huaracino y sinceramente, pensé que iba ser un parlamentario que daría mucho
que hablar, por su forma de hacer política, un tanto histriónica. Sin embargo,
conocemos los proyectos que él ha presentando y solo hemos encontrado cinco
pedidos, y de los cinco pedidos solo tres son de Ancash, el otro es para el
distrito de San Martín de Porres en Lima y el otro, referido a la universidad
del Cuzco, ha firmado doce proyectos de ley, cuando estuvo en el FIM y ha
firmado tres mociones. No ha presentando ningún proyecto sobre el cañon minero,
no existe.
Pasemos ahora, a las preguntas sobre
Huaraz. Cómo la encuentra.
Siempre
es grato estar en casa, he vivido acá hasta los 18-19 años cuando emigré a la
capital, y emigré porque en ese año no había la facultad de Derecho en Huaraz,
de repente me hubiera quedado, a Dios gracias, me va muy bien. Encuentro a
Huaraz, que ha crecido bastante… todavía estoy en deuda con mi tierra, con
Huaraz, es verdad que he publicado ocho libros, pero creo que todavía no le he
dado lo mucho que me dio Huaraz,
Tenemos dos emporios mineros, que pueden
ser los ojos del desarrollo departamental; Pierina y Altamina. Cómo debe ser la
relación que debe orientarse con ellos.
Fíjese,
alzar bandera cavernarias de enfrentamiento de los gamonales y los explotados,
eso se acabó, forma parte del siglo pasado, el muro de Berlín ya se cayó, Rusia
ya se abrió, en consecuencia, hay que abrir las puertas a la inversión privada
y las relaciones tienen que ser las más cordiales, pero, dentro de la ley, sin
que la inversión privada a las
autoridades abusen, debemos sumar puntos.
Usted pertenece a esa pléyade de
luzuriaguinos de finales de la década de los setenta, muchos de sus
contemporáneos hoy ocupan cargos importantes, como el alcalde Ladislao Cruz
Villachica.
Sí,
definitivamente fue una linda generación, por supuesto, Lalo Villa es uno de
ellos, no del mismo salón, pero de la misma promoción…
¿Otros…?
Fredy
Otárola, Holger Valdivia, Néjer García, mi entrañable amigo Enrique Ortega
quien e mi “nexo” en Huaraz y siempre lo paro llamando para que me diga como
están las cosas por aquí… creo que fue una muy buena generación y mi eterno
agradecimiento a mis profesores, muchos de ellos todavía los veo.
La Plaza de Armas de Huaraz, siempre
merece un comentario aparte.
Sí,
es un poco peculiar, depende de los gustos… tiene diversos comentarios, a mi
particular, no me satisface plenamente, pero tiene algunas cosas bonitas.
Finalmente, usted dijo que tiene una
cuenta pendiente con Huaraz, y estamos a puertas de unas elecciones. ¿Le
gustaría representar a Huaraz en el
próximo parlamento?
Sí,
si se presentara esa coyuntura sí… todavía no he tomado esa decisión, pero
cuando llegue el momento, tiene que ser una decisión muy meditada, tendría que
consultar con mi familia, luego, una decisión corporativa con personal de mi
estudio… es decir, ello obedece a muchas circunstancias.
Si se produjiera, le deseamos mucha
suerte.
Gracias,
gracias de verdad.
“De
los ex candidatos presidenciales, no veo a nadie con un perfil ganador, y que
se desenvuelva favorablemente en la actual coyuntura” sostiene Castiglioni.
QUÉ
SEMANA, ENTREVISTA, 09 DE OCTUBRE DEL 2000.
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